Poblamiento humano, territorio y cambios ambientales durante el final del Paleolítico superior (OIS 2) en el sector central de la Cordillera Cantábrica

COVA ROSA

Situación y características

Se encuentra en la localidad de Sardéu, a 5,5 km en línea recta de la línea de costa actual. La cueva se encuentra en el fondo de una depresión endorreica, al pie del crestón de la peña Pagadín (417 m s. n. m.). Forma parte del sistema kárstico de la peña Pagadín y está configurada por un gran abrigo rocoso que da paso a la cavidad subterránea propiamente dicha, la cual presenta un importante desarrollo kárstico por el que circula el arroyo de los Escajales antes de salir al exterior, al O de la localidad de Soto. La entrada de la cueva se encuentra a 149 m s. n. m., en el fondo de una depresión endorreica de 73 m de profundidad, en el extremo NO de un valle ciego por el que circula el arroyo de los Escajales, al pie de la cresta caliza de Peña Pagadín en su ladera S. El arroyo atraviesa la peña de S a N y después de un recorrido subterráneo de unos 400 m, surge en la ladera N por la surgencia de Les Bolugues, para verter sus aguas al río del Acebo, a escasos metros de la surgencia. Se trata de un gran abrigo rocoso, de 25 m de ancho y 15 m de alto orientado al SE, que da acceso a la cueva del mismo nombre, cuya entrada ahora está bloqueada y solo se puede acceder con técnicas espeleológicas. El arroyo de los Escajales que fluye en el valle ciego se hunde actualmente en el karst 28 m por debajo del abrigo, mientras que en el Pleistoceno el sumidero del arroyo era a través del propio abrigo.

Historia de las investigaciones

Las primeras prospecciones en Cova Rosa fueron llevadas a cabo por Francisco Jordá Cerdá (FJC) en 1957, que encontró una parte del yacimiento afectado por actividades clandestinas, y en 1958 procedió a realizar excavaciones arqueológicas en el corte S de la zanja de los saqueadores (sector A). Estos trabajos le permitieron distinguir nueve capas que fueron denominadas con números (1º a 9ª), con una potencia de 1,45 m, en las que localizó dos horizontes culturales, uno adscrito al Solutrense superior y otro al Magdaleniense inferior. De esta intervención contamos con el diario de campo de FJC y los correspondientes materiales han sido ampliamente estudiados. Además, en 1964 FJC realizó otra campaña de excavación, esta vez afectando al corte N de la zanja de los saqueadores (sector B), donde levantó cuatro grandes niveles (I a IV), estructurados en doce capas (1ª a 12ª), que constataron la cronología señalada anteriormente. Los materiales arqueológicos de ambas intervenciones están depositados en el Museo Arqueológico de Asturias (MAA) y han sido recientemente publicados. De estas excavaciones contamos con el diario de campo de FJC y con una pequeña colección de fotografías.

Posteriormente, FJC y Alejandro Gómez Fuentes (AGF) excavan en el yacimiento entre 1975 y 1979, tras una limpieza de las nuevas actuaciones de furtivos y de los cortes de las excavaciones anteriores. Todo el sedimento excavado fue cribado y lavado a través de tamices de 5, 2 y 0,4 mm de luz. Los materiales arqueológicos (industrias lítica y ósea, macro y microfauna y herpetofauna) que se estudian en la publicación de 1982 hacen referencia exclusivamente al nivel Cova Rosa A-0, que se sitúa cronológicamente en un momento de transición del Magdaleniense superior/final al Aziliense. Gran parte de los restos arqueológicos de las excavaciones de 1975 a 1979 se encuentran actualmente en estudio en el Departamento de Prehistoria, Historia Antigua y Arqueología de la Universidad de Salamanca (DPHAA-USAL), donde están siendo estudiados y procesados actualmente por un equipo interdisciplinar.

A partir del año 2016, un equipo dirigido por dos de los firmantes (EAF y JFJP) realizaron actividades arqueológicas en 2017 y 2019, en las que se levantó el plano topográfico de la cavidad y se llevó a cabo una intervención arqueológica cuyos objetivos fueron la limpieza de las superficies excavadas y de las secciones estratigráficas conservadas y la toma de muestras. Los primeros resultados de estas intervenciones se han publicado recientemente.

Estratigrafía

Una vez limpiadas y refrescadas las secciones estratigráficas procedimos a la identificación de los distintos niveles que componen la secuencia arqueosedimentaria del yacimiento de Cova Rosa, siguiendo las descripciones estratigráficas de FJC y la secuencia litoestratigráfica realizada por Manuel Hoyos Gómez (MHG) en 1979.

Se identificaron seis niveles o unidades con un espesor total entre 1,80 y 2 m sustrato rocoso:  CR6, aparentemente estéril; CR.5, CR.4 y CR.3, Solutrense; CR.2 y CR.1, Magdaleniense inferior; y CR1bis, Magdaleniense superior.  Además, adheridos a la pared del abrigo, a 1,5 m sobre el suelo actual, aparecen escasos restos del techo de un conchero fuertemente cementado (CR-Conchero) del Mesolítico, y hacia el interior del abrigo, sobre el nivel CR1 se dispone un depósito de cono aluvial de 0 a 20 cm con restos de micromamíferos (CR-Cono) que lateralmente pasa a una costra estalagmítica. Estos seis niveles los hemos podido correlacionar  con  los niveles detectados por los diferentes investigadores que han trabajado en Cova Rosa.

La secuencia de Cova Rosa se extiende entre ca. 24.000 y 7.500 cal BP con niveles que se adscriben al final del Pleistoceno superior (Solutrense y Magdaleniense) y a comienzos del Holoceno (Mesolítico). Cronoestratigráficamente, la secuencia conocida comienza en el GI2 (final del OIS 3), cubre todo el Último Máximo Glacial (casi todo el OIS 2) y se interrumpe bruscamente en el límite de este con el GI1 o Tardiglacial, estando también ausente el registro del GS 1 o Dryas reciente y todo el Groenlandiense (Holoceno inferior, OIS 1) hasta el evento 8.2. Finalmente, está representado el inicio del Norgripiense (Holoceno medio, OIS 1) por los restos del conchero mesolítico.